A finales de la Primera Guerra Mundial, Alemania derrotada, sabotea las instalaciones de su flota para que no caigan en manos de los aliados. El Tratado de Versalles pronto impone estrictas limitaciones. En lo que se refiere a los submarinos U-Boote que tanto impresionaron a los aliados durante el último conflicto, Alemania no deberá poseer ni una sola unidad. Pero, como un ave Fénix, el alma submarina alemana renace de sus cenizas, y con toda discreción sortea las cláusulas del tratado de Versalles, convirtiendo a los U-Boot en una de las armas más temibles del IIIer Reich. 

Octubre 1939: Cuando consigue introducirse en Scapa Flow, y hundir el acorazado HMS Royal Oak, Günther Prien y su tripulación, a bordo del U-47, entran de pronto en la leyenda. Ocho operaciones más tarde, el U-47 se convierte en el más temible de los “lobos grises”, a la cabeza de un grupo de tres naves que dan caza a un convoy. Pero el comandante Walters y su destructor británico no son hombres que se dejen vencer. Una vieja venganza provocada por la muerte de su hijo a bordo del Royal Oak lleva al comandante a una violenta reacción. En el fragor de la batalla, Prien y Walters se enfrentan en un cara a cara sin límites donde cada uno utilizará toda su potencia explosiva. ¿Quién cometerá un error fatal y dejará vencer al adversario? En el almirantazgo alemán reina el pesimismo. Se ha descubierto recientemente una brecha en el seno de su seguridad que amenaza los U-Boote en el mar, y las comunicaciones con el U-47 se interrumpirán durante semanas. ¿Le ha llegado la hora al “Toro de Scapa Flow”?