En el año 1975 y ante la necesidad de un nuevo reactor de enseñanza que sustituyera al T-6 Texan, el Ejército del Aire contrató con la empresa CASA el desarrollo y la fabricación de cuatro prototipos del avión C-101 Aviojet, denominado también E.25 Mirlo.

Para los futuros pilotos del Ejército del Aire, la Escuela Básica y el C-101 Aviojet, son su última etapa de vuelo en la AGA. Si la superan, serán destinados, según sus calificaciones a las escuelas de especialización: caza/ataque, transporte o helicópteros.

Con más de 40 años en servicio y gracias a su simplicidad y economía de operación, ha llegado a viejo acumulando miles de horas de vuelo, teniendo a gala estar siempre dispuesto para enseñar y para formar con orgullo la enseña nacional tras cada exhibición de la Patrulla Águila.

A punto de dar por finalizada su vida operativa y esperando la inminente llegada de su reemplazo, sirva el presente Especial de Avion Revue como homenaje a la fiel montura que ha formado a tantos y tan excelentes pilotos del Ejército del Aire y que tantos buenos ratos ha hecho pasar a tantos espectadores en festivales, demostraciones y conmemoraciones aéreas.